835 empresas de diferentes dimensiones y tipología tienen su sede dentro de los puertos deportivos catalanes. Hay que preservar este tejido empresarial que da trabajo a 32.638 personas

Las embarcaciones, por seguridad de las mismas y de los tripulantes, requieren un mantenimiento y revisión periódica por parte de los usuarios

Los Puertos Deportivos son espacios amplios al aire libre, grandes parques junto al mar sin aglomeraciones, de uso habitual de personas que ya comparten espacios comunes

La Asociación Catalana de Puertos Deportivos y Turísticos (ACPET) pide que los Puertos Deportivos puedan recibir a sus usuarios en las primeras fases del desconfinamiento. Debido a las características sectoriales de los puertos y la legalidad vigente, a pesar del Estado de Alarma deben tener las instalaciones en servicio y seguir cuidando de los 30.000 barcos que se guarecen en los amarres de los 45 puertos deportivos de la costa catalana, sin descuidar la vigilancia y control del espejo de agua, además de todos los establecimientos -hoy cerrados- del área de tierra, y el mantenimiento general de todo el recinto portuario. Esta actividad que realizan los concesionarios, es un gasto importante e ineludible en un momento en que todos los elementos de explotación son nulos. Los puertos están abiertos 365 días en el año y 24 horas en el día, circunstancia que hace muy difícil poder reducir el importante gasto vinculado a esta disponibilidad. Hay una gran preocupación por el futuro del sector. Un futuro que se presenta muy complicado y con importantes consecuencias económicas y laborales sí esta fase de confinamiento se alarga mucho más. 

La ACPET, siempre bajo las medidas de seguridad decretadas por las correspondientes autoridades, remarca varios aspectos de importancia para el retorno a la actividad como que:

• El ocio familiar, desde su vertiente náutica, tiene su centro neurálgico en los Puertos Deportivos. Si a partir del día 2 se puede salir a pasear, también es necesario que se pueda salir a pasear en barco.
• El barco no deja de ser una prolongación del confinamiento. El 88% de la flota son embarcaciones inferiores a 10 metros de eslora. Su espacios  son casi individuales o como máximo de 4 personas, a menudo del mismo núcleo familiar. Una vez a bordo y ya dentro del mar la movilidad y acercamiento a otras personas no es posible.
• No hay que confundir el ocio náutico con la competición náutica, (regatas de vela, etc.) y todavía menos con la muy minoritaria náutica de lujo, la de grandes yates, que no representa ni el 0,2% de la flota.
• Las embarcaciones, por seguridad de las mismas y de los tripulantes, requieren un mantenimiento y revisión periódica por parte de los usuarios, por lo que es muy importante que estas personas, que disfrutan del ocio náutico, y que son la mayoría de las que tienen embarcaciones en los puertos, puedan acceder, poner en marcha motores, cargar baterías, revisar bombas de achique, limpiar cubiertas, cuidar la teca, hacer pequeñas reparaciones, y por supuesto salir al mar.
• Los puertos deportivos son principalmente espacios muy amplios al aire libre, junto al mar, donde no hay grandes aglomeraciones de gente.
• El ocio náutico es una actividad que se hace a nivel individual o con muy pocas personas. Si algo se puede considerar de bajo riesgo en cuanto a la propagación del Coronavirus, es salir a navegar, ya sea a vela, a motor, o a pescar. El ocio náutico es básicamente familiar, lo que comporta que todavía quede más relativizado el riesgo de propagación vírica, ya que son personas que habitualmente comparten espacios comunes.
• La práctica de la vela, así como otros deportes náuticos como el paddle sup o el kayak, en muchos casos se realiza de manera individual y siempre al aire libre. 

La ACPET tiene asociados el 95% de los Puertos Deportivos y Turísticos de Cataluña. Desde la Asociación remarcan la importancia de que la actividad vuelva a reactivarse cuando antes mejor, ya que  de ello dependen 835 empresas con 32.638 trabajadores, entre directos, indirectos e inducidos. Hay que remarcar que debido a la importancia del ocio náutico, se trata de un sector clave para la economía y que con el apoyo adecuado puede ser un pilar fundamental para la supervivencia del sector y la reactivación del turismo y el ocio interno.